Madagascar espera otra tormenta tropical sin recuperarse del ciclón Batsirai

0
516
Facebook
Twitter
Pinterest
WhatsApp
Destrucción provocada por el ciclón en Madagascar - FOTO: MSF

Hoy tocará tierra la tormenta tropical Dumako, diez días después de la destrucción provocada por el ciclón tropical Batsirai

El Programa Mundial de Alimentos, UNICEF y varias ONG, se han desplegado por el país para atender a las víctimas y prevenir la inseguridad alimentaria y una explosión de casos de malaria

Héctor Alonso

Los equipos de rescate siguen encontrando víctimas del ciclón tropical Batsirai diez después de su paso por Madagascar. Hasta el momento se han contabilizado 121 fallecidos, incluyendo los más de 90 que murieron en los deslizamientos de tierra de Ikongo. Más de 29.000 personas se han quedado sin hogar o han tenido que buscar refugio en otros sitios tras inundarse sus viviendas.

Sin embargo, es posible que los equipos de rescate y ayuda tengan que interrumpir sus trabajos hoy, cuando se espera que toque tierra la tormenta tropical Dumako y cuando buena parte del país aún se encuentra aislada y sin energía eléctrica tras la destrucción provocada por Batsirai.

Los escolares se están viendo afectados con especial dureza: además de perder sus hogares más de 4.500 aulas han resultado destruidas o dañadas, por lo que 133.600 niños se han quedado sin escuela.

Un riesgo inmediato es la malaria, una enfermedad transmitida por un mosquito y que aumenta exponencialmente tras las lluvias y especialmente en situaciones de catástrofe, con muchas personas sin refugio seguro. Los huevos de los mosquitos que transmiten la malaria son puestos en charcos y zonas donde se ha acumulado el agua. Las medidas de prevención son la fumigación de esas áreas, algo que ahora no se podrá hacer, y las mosquiteras en las casas, pero hay miles de personas que permanecen en refugios precarios.

Otro problema que está siendo abordado es el de la seguridad alimentaria. El Programa Mundial de Alimentos (PAM) está distribuyendo alimentos y dinero en efectivo a las familias afectadas para que puedan adquirir comida al menos durante los próximos tres meses. UNICEF, por su parte, ha proporcionado medicamentos para tratar al menos 50.000 casos de malaria, uno de los mayores riesgos a que se enfrentan miles de malgaches tras las lluvias. También se están reparando las cadenas de frío para asegurar el suministro de medicamentos y vacunas.

Parte del país aún está incomunicada, como la ciudad de Fianarantsoa, por la caída de un puente. Muchos de sus habitantes podrían estar semanas sin atención médica, según informó Médicos Sin Fronteras, que ha inspeccionado la zona.

Otras áreas son inaccesibles por la inundación de las carreteras y la crecida de las aguas. La ciudad de Mananjary ha sufrido enormes daños, su hospital ya no funciona y cinco centros de salud han resultado completamente destruidos. Tampoco hay electricidad en grandes áreas del país.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí