La enfermedad transmitida por el agua se ha extendido rápidamente desde mediados de febrero debido a la falta de saneamiento y a la falta de agua potable en los campamentos.
Un brote de cólera en campos de refugiados hacinados en Uganda ha matado a unas 40 personas e infectado a más de 2.000, mientras los trabajadores de salud tratan de frenar la propagación.
Casi 70.000 personas han huido de la República Democrática del Congo a Uganda este año debido a un aumento en la violencia étnica. Desde entonces se han multiplicado los casos de cólera, según ha informado Cruz Roja y Media Luna Roja, debido a la falta de saneamiento y de agua potable en los campamentos. Las agencias de ayuda han establecido centros de tratamiento y están transportando camiones de agua potable.
La mayoría de las personas se recuperan del cólera si se las trata con prontitud con sales de rehidratación oral, pero pueden morir en cuestión de horas si no lo hacen, especialmente los niños y las personas con otras enfermedades.
Las personas que huyen de la provincia de Ituri en el Congo cruzan el Lago Alberto en botes para llegar a Uganda. Más del 80 por ciento de las llegadas son mujeres y niños, y muchos tienen problemas de salud. «La mayoría llegan exhaustos, traumatizados y sin apenas pertenencias personales, según la Cruz Roja de Uganda.
Esta llegada masiva de refugiados ha supuesto una sobrecarga en los centros de salud e instalaciones sanitarias, sin capacidad para atender a tanta gente. Tampoco hay infraestructuras para alojarles: la gente está durmiendo en el suelo, en hangares y cobertizos improvisados, porque no hay sitio en los centros de recepción en las orillas del lago.
Médicos Sin Fronteras, por otra parte, ha alertado de la posibilidad de que se inicie un brote de sarampión.
ACNUR, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados calcula que el número de refugiados que podrían llegar a esa zona este año podría superar los 200.000. Durante el año pasado más de 1.000 personas murieron por cólera en Congo, incluyendo en la capital, Kinshasa.
Hay que recordar también que Uganda acoge a centenares de miles de refugiados procedentes de Sudán del Sur.