Un campamento de verano en invierno
Más de 120.000 personas desplazadas por los combates han llegado a Kharkov en busca de seguridad y protección. El número crece día a día. Sin un final a la crisis las personas que alojaron familiares y amigos ya no pueden más. Equipar el campo para los meses de invierno, muy duro en Ucrania, fue el mayor desafío para Oxana y su marido. El campamento fue construido los meses de verano, por lo que no tiene sistemas de calefacción o instalaciones de saneamiento adecuadas. Sin embargo, el apoyo llegó de manos de varias organizaciones humanitarias. La Agencia polaca de Ayuda Humanitaria y la Agencia Americana de Ayuda les proporcionaron, entre otras cosas, calefacción. Las obras están aún en marcha, pero cuando finalicen, el campamento será capaz de alojar a más de 400 personas, duplicando su capacidad actual.
«Las personas afectadas por esta tragedia necesitan de todo: alimentos, alojamiento o trabajo”, dice Barbara Manzi, jefa de la oficina de Ucrania de la OCAH. «Las organizaciones humanitarias con experiencia han estado trabajando desde el inicio de la crisis para ayudar a los más vulnerables, pero la gente como Oxana son los auténticos héroes gracias a su solidaridad. De momento, gentes como Oxana han preferido la solidaridad al negocio, mientras esperan que la situación se resuelva.