Más de 1,6 millones de ucranianos se han convertido en desplazados
El conflicto en el que está sumida Ucrania desde abril de 2014 ha desaparecido de los medios de comunicación. Desde aquella fecha han muerto más de 2.500 personas, la mayoría civiles y 1,6 millones de personas se han convertido en desplazados. Buena parte de la población del país es, de una y otra forma, víctima del conflicto, que parece no tener un fin cercano.
La semana pasada una delegación de la ONU, de la que formaban parteala Coordinadora Adjunta de Ayuda de Emergencia de la ONU, Ursula Mueller, visitó Ucrania durante tres días para presenciar de primera mano el impacto continuo del conflicto en millones de civiles. «Tenemos que recordar a las partes su obligación de proteger a los civiles», dijo al llegar a la capital, Kiev. Como en todo conflicto, las principales víctimas son los civiles, entre ellos mujeres y niños.
La situación de los desplazados es especialmente preocupante: centenares de miles de familias tuvieron que abandonar sus hogares y sus trabajos. Ahora muchos malviven sin ingresos, después de gastar todos sus ahorros. Muchos están viviendo en centros para desplazados, que carecen de buenas condiciones de habitabilidad, y otros han perdido el contacto con sus familiares, desplazados a otras zonas o forzados a quedarse. Con el invierno cerca muchos se plantean regresar a sus hogares, a pesar del peligro de los bombardeos y combates. La dureza del invierno en refugios húmedos y sin calefacción o sin dinero para comprar carbón es casi peor que el riesgo de regresar.
Sin embargo, el panorama de lo que les espera si regresan tampoco es muy esperanzador: los combates han destruido infraestructuras, como escuelas, hospitales o instalaciones de suministro de agua, especialmente en las provincias de Donetsk y Luhansk.
Sin apoyo financiero
A pesar de la situación de los desplazados, el Plan de Respuesta Humanitaria 2017 apenas ha contado con el 26 por ciento de financiación. Por esta razón, la Coordinadora Adjunta de Ayuda de Emergencia de la ONU, Ursula Mueller ha solicitado a los donantes que aumenten las aportaciones económicas para garantizar que la población más vulnerable, niños, ancianos y mujeres, cuenten con alimentos, agua potable, medicinas, un techo y combustible para calefacción.
Otro de los problemas que comprobó in situ Mueller fue la dificultad para acceder a la zona fuera del control del gobierno, una frontera de facto de 459 kilómetros, donde las organizaciones humanitarias tienen dificultades para acceder. Tan sólo en agosto más de un millón de personas cruzó esa frontera para acceder a servicios médicos, poder cobrar su pensión o visitar a sus familiares. Cada intento supone esperar en los puestos de control diez o quince horas, pero muchos no tienen otra opción que intentarlo si quieren cobrar su pensión, por ejemplo.
Que apoyo brinda EE UU a sus soldados americanos que estan hace mas dede un ano sirviendo a la patria en Ucrania en la zona de conflicto fueron atacados en noviembre y estan abandonados en hospitales de campana