Proponen tres medidas:
- distribución del exceso de vacunas en manos de los países desarrollados
- apoyo a la vacunación en los países con menos recursos
- liberar las patentes y la tecnología para fabricar más vacunas
Héctor Alonso
Médicos Sin Fronteras (MSF), una de las ONG más grandes del mundo, ha pedido un cambio en la estrategia mundial en la lucha contra la pandemia con motivo de la reunión de los líderes mundiales en la Asamblea General de la ONU, donde se ha discutido sobre la respuesta a la COVID-19, que ha matado ya a casi cinco millones de personas en todo el mundo.
MSF ha recordado en un comunicado que la respuesta global a la pandemia no ha logrado ofrecer un acceso igualitario y equitativo a las vacunas: mientras hay un número limitado de países cuya población se ha podido proteger frente a la enfermedad, la mayoría de los países del mundo no disponen de vacunas para todos sus ciudadanos. «Cuanto más tiempo permanezca dividido el mundo entre aquellas personas expuestas a la COVID-19 y las que no están expuestas, más se prolongará la pandemia, más posibilidades hay de que se desarrollen nuevas variantes y se seguirán produciendo muertes y sufrimiento».
Sin embargo, en MSF creen que aún estamos a tiempo para dar un giro a la situación.
Hasta el momento han muerto casi cinco millones de personas, y la falta de acceso a diagnósticos, vacunas y tratamientos en la mayoría de países de África, Asia y Latinoamérica es una realidad que está devastando los sistemas de salud y la economía de esos países.
MSF propone tres medidas urgentes: redistribución del exceso de vacunas que poseen los países desarrollados antes de que caduquen a través del mecanismo COVAX u otros organismos regionales; apoyar a esos países para que puedan llevar a cabo la vacunación y forzar a las compañías farmacéuticas para que compartan la tecnología ARNm con el Centro de Transferencia de Tecnología de Vacunas ARNm de la Organización Mundial de la Salud (Sudáfrica). Para ello solo deberían seguir la petición de más de 100 países ante la Organización Mundial del Comercio para eliminar las barreras de propiedad intelectual. Así se conseguiría aumentar la oferta y la disponibilidad de dosis.
El impacto de estas medidas sería enorme: cada día mueren 10.000 personas en todo el mundo por esta enfermedad.
Cambiado. Un error al escribirlo, gracias
ARNm no ARMn