Se pretende alcanzar la inmunidad de grupo al vacunar a toda la población objetivo
Sierra Leona ha comenzado una campaña para inmunizar contra la polio a 520.000 niños menores de cinco años con la nueva vacuna oral. Entre diciembre y junio el país registró un brote de poliovirus cVDPV2 derivado de la vacuna anterior que afectó a 34 niños. Otros 23 países africanos han sufrido brotes similares.
La razón de estos brotes se atribuye a la disminución de las vacunaciones por culpa de la pandemia por COVID-19, que bajó el nivel de inmunidad de la población. Con esta campaña se pretende inmunizar a todos los niños menores de cinco años e interrumpir así la transmisión del virus. La OMS cree que si se logra vacunar a la población objetivo se logrará la inmunidad colectiva frente al poliovirus.
La campaña cuenta con el apoyo al ministerio de Salud de la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Poliomielitis (GPEI), una coalición formada por la OMS, UNICEF, la Fundación Bill y Melinda Gates, y otras organizaciones. Para desarrollarla se ha formado a miles de trabajadores sanitarios, voluntarios comunitarios y supervisores, con el objetivo de no dejar a ningún niño sin vacunar.
En agosto de 2020 África fue declarada libre del virus de la polio salvaje después de tres años sin ningún caso registrado. Los brotes que se han sucedido desde entonces son derivados de la vacuna: población no revacunada y en zonas con malas infraestructuras de saneamiento. El virus se ha transmitido a través de aguas contaminadas por las deposiciones de las personas vacunadas, falta de agua potable limpia y malas condiciones de higiene.
La poliomielitis es una enfermedad debilitante y potencialmente mortal. El virus es altamente infeccioso y no tiene cura una vez que afecta a un individuo y puede provocar parálisis o incluso la muerte. Los niños pequeños son los más vulnerables. Sin embargo, la enfermedad es totalmente prevenible con vacunas seguras y efectivas que, si se administran varias veces, pueden proteger al niño de por vida.