Millones de desplazados internos no tienen la posibilidad de protegerse del virus
En estos momentos más de 40 millones de personas son especialmente vulnerables al COVID-19. Son los desplazados internos: personas que han tenido que abandonar su hogar sin salir de su país para escapar de la violencia, el hambre o los desastres naturales.
La mayoría de ellos no pueden «aislarse» ni disfrutar de agua limpia o saneamiento adecuado, ni ser tratados médicamente como las personas que viven en su hogar. Millones viven en condiciones de hacinamiento, sin acceso a la atención médica ni apoyo de sus gobiernos.
La organización Internal Displacement Monitoring Centre se dedica a recopilar datos sobre los desplazados internos, incluyendo últimamente casos de enfermedad por el coronavirus, para tratar de evacuar y aislar a las personas que están enfermando, lo que no siempre es sencillo. Ya hay casos reportados entre desplazados internos de Irak y se está tratando de mejorar la situación especialmente vulnerable de desplazados internos en Burkina Faso, Siria, Venezuela y Palestina, en colaboración con ACNUR, el Consejo Noruego para los Refugiados y otras organizaciones.