Desde noviembre de 2014, se han denunciado 148 ataques a albinos y sólo dos juicios. Son asesinados y mutilados para hacer magia negra
Amnistía Internacional y otras organizaciones de defensa de los derechos humanos han pedido al gobierno de Malawi que reforme urgentemente su sistema de justicia penal para proteger a las personas albinas, que están siendo asesinadas y mutiladas para usar partes de su cuerpo en ritos de magia negra. Desde 2014 se han denunciado 148 ataques a personas albinas en el país y tan sólo se han celebrado dos procesos penales.
El principal experto en albinismo de las Naciones Unidas, Ikponwosa Ero, ha explicado a los medios de comunicación que ciertas partes del cuerpo de las personas albinas podrían llegar a alcanzar un precio de miles de dólares en el mercado clandestino, que llega hasta Mozambique y Tanzania. La situación es tan grave que las personas con albinismo -falta de pigmentación en la piel, el cabello y los ojos- están a punto de desaparecer en Malawi por culpa de las creencias mágicas.
Amnistía Internacional, a través de su director para África del Sur, exigió a las autoridades de Malawi que pongan fin de inmediato a la impunidad de la que gozan estos crímenes. «Las autoridades de Malawi deben garantizar que las personas con albinismo no vivan con miedo a las bandas organizadas que les asesinan y mutilan para vender partes de sus cuerpos”. Para ello el gobierno debe
reformar el sistema judicial para garantizar su seguridad y protección.
El informe de Amnistía Internacional ha registrado 148 casos, que incluyen 14 asesinatos y siete intentos de asesinato según datos de la policía. Amnistía Internacional eleva la cifra hasta al menos 21 asesinatos.
Como parte de la estrategia para luchar contra estas creencias, la Asociación de Personas con Albinismo de Malawi presentará a siete candidatos albinos en las elecciones del próximo año, para tratar de combatir el estigma que sufren estas personas. Las creencias de que partes de las personas albinas pueden traer buena suerte y fortuna están en la base de las mutilaciones, asesinatos y comercio clandestino.
Se estima que en Malawi viven entre 7.000 y 10.000 personas albinas, que tienen que enfrentarse diariamente a los prejuicios y al riesgo de ser atacadas.
