Además de violencia política, hay restricciones a la libertad de expresión en medio de un auge del islamismo. Las elecciones serán el 30 de diciembre
Expertos de Derechos Humanos de la ONU han expresado su alarma ante el aumento de la violencia política, las restricciones a la libertad de expresión y el auge del islamismo en Bangladesh, a pocos días de la celebración de las elecciones generales (30 de diciembre). Bangladesh se enfrenta, además, a la presencia de más de 800.000 refugiados rohingya que han llegado al país en el último año, tras huir de la vecina Myanmar.
Las fuerzas de seguridad habrían arrestado e intimidado a figuras de la oposición y voces disidentes, según los observadores de la ONU. Miembros y partidarios de los partidos de oposición han sido arrestados, asesinados o han desaparecido. Los informes recogen que en muchos de los incidentes han estado implicados seguidores del partido gobernante. La situación es tan grave que uno de los Comisionados de las elecciones ha expresado la opinión de que no hay condiciones de libertad e igualdad para concurrir a estas elecciones.
Uno de los incidentes más graves ha sido el ataque sufrido por la caravana del candidato de la oposición Kamal Hossain el pasado 14 de diciembre, durante el cual al menos 25 personas resultaron heridas. Entre el 9 y el 12 de diciembre se han reportado 47 incidentes de violencia en los que ocho personas murieron y 560 resultaron heridas.
«Instamos a las autoridades a permitir y alentar el monitoreo de la situación de los derechos humanos por parte de la sociedad civil en el período previo, durante y después de las elecciones», dijeron los expertos.
Auge del fundamentalismo islámico
Los expertos de la ONU expresaron su grave preocupación por el aumento del fundamentalismo religioso y el impacto negativo sobre los derechos humanos, incluido el derecho a la vida, el derecho a participar en la vida cultural, la libertad de expresión y la libertad de religión o de creencias. Les preocupaban los informes de que los dos principales partidos políticos han tratado de establecer alianzas con grupos fundamentalistas.
«Las crecientes restricciones a la libertad de expresión, combinadas con la violencia relacionada con las elecciones y el aumento del fundamentalismo, han creado un clima de temor en Bangladesh, que las autoridades deben abordar con urgencia», ha dicho la Relatora Especial de la ONU para los Derechos Culturales, Karima Bennoune, quien en un informe de 2017 al Consejo de Derechos Humanos abordó el tema del impacto del fundamentalismo en los derechos culturales.
Control de las redes sociales y censura
Los expertos expresaron su preocupación por el uso de la vigilancia, la intimidación y el enjuiciamiento por motivos políticos de miembros clave de la oposición. «Estamos particularmente preocupados por el uso de la Ley de seguridad digital para criminalizar a los periodistas y cualquier persona que use las redes sociales expresando libremente sus opiniones, y por el impacto que tiene en el derecho del público a saber, que es de suma importancia en el contexto de una elección». dijeron los expertos.
El temor es que con motivo de las elecciones se desencadene un proceso de violencia contra las figuras de la oposición y los laicos, y los ataques contra miembros de minorías religiosas, sus hogares, templos y fuentes de sustento. «Tomados en conjunto, los acontecimientos recientes suscitan serias preocupaciones acerca de si las elecciones se pueden llevar a cabo de manera libre y justa. «Hacemos un llamado a las autoridades para detener la marea de la violencia con urgencia, y para demostrar su compromiso con los derechos humanos y con unas elecciones verdaderamente libres y justas».
