El dinero servirá para apoyar a 735.000 refugiados y más de medio millón de anfitriones que les acogen en Etiopía
Este es un resumen de lo que dijo el portavoz del ACNUR, Andrej Mahecic, a quien se puede atribuir el texto citado, en la conferencia de prensa de hoy en el Palacio de las Naciones en Ginebra.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha solicitado apoyo internacional para financiar durante 2020 los programas dirigidos a los 735.000 refugiados que hay en Etiopía y las comunidades de acogida, un total de 1,2 millones de personas.
Durante los últimos tres años Etiopía ha estado acogiendo refugiados, a los que se otorga el derecho a trabajar y acceso a los servicios sociales en las comunidades de acogida. En enero del pasado año el gobierno etíope aprobó leyes para permitir a los refugiados obtener permiso de trabajo, acceder a la educación primaria, obtener el carnet de conducir o acceder a los servicios financieros nacionales, como la banca.
Sin embargo Etiopía tiene serias deficiencias en salud, nutrición, vivienda o educación, por lo que la acogida de estos refugiados supone una presión enorme para su economía.
Etiopía tiene una larga historia de acogida de refugiados y solicitantes de asilo. Actualmente alberga a más de 735.000 refugiados de 26 nacionalidades, la mayoría de Sudán del Sur (329.123), Somalia (191.575), Eritrea (139.281) y Sudán (42.285). Las previsiones son que el número de refugiados aumente este año. Tan solo en 2019 llegaron más de 100.000 nuevos refugiados al país. Etiopía tiene, además, un alto número de desplazados internos y un grave problema de inseguridad alimentaria, con más de 8,4 millones de personas que necesitarán asistencia durante 2020.
