Más de 20.000 niños han sido trasladados fuera de la zona de peligro
La erupción del volcán Taal, a sesenta kilómetros de la capital, Manila, ha obligado a evacuar a más de 20.000 niños fuera de la zona de peligro, catorce kilómetros del volcán. Los niños han sido alojados en puntos de refugio mal dotados, con poco espacio y en condiciones precarias.
Debido a la premura en la evacuación, muchas personas han llegado a los puntos de refugio sin más que lo puesto, sin mantas ni colchones, por lo que están durmiendo en el suelo, según la organización Save the Children. Tampoco hay suministro para bebés, como pañales, artículos de higiene o mosquiteras.
Los niños pequeños padecen enfermedades respiratorias como tos y resfriados. Con más de 200 temblores de tierra provocados por el volcán, las familias tienen miedo de regresar.
Mientras tanto los niños están perdiendo clases y viven en una incertidumbre que las organizaciones consideran negativas para su desarrollo. Por esta razón las ONG que trabajan en la zona están solicitando apoyo y ayuda internacional.
