«El cambio climático es la mayor oportunidad financiera y comercial del próximo siglo», coinciden los grandes líderes empresariales participantes en el Foro Económico Mundial
El cambio climático puede ser una enorme oportunidad de negocios, según creen los asistentes al Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), donde se han reunido políticos y financieros de todo el mundo. El pastel de la lucha contra el cambio climático puede ser enorme: 6 billones de dólares, según algunos de los presidentes de grandes multinacionales asistentes.
«El cambio climático es la mayor oportunidad financiera y comercial del próximo siglo», aseguró Anand Mahindra, presidente del Grupo Mahindra, un conglomerado que factura 19.000 millones de dólares. Mahindra comparó esta oportunidad con la popularización del automóvil y la creación y desarrollo de toda una industria a su alrededor. “El cambio climático también traerá nuevos electrodomésticos, tecnologías y la adaptación de los antiguos”, dijo.
Este empresario preguntó a los asistentes que escuchaban su intervención preguntándoles por qué veían el cambio climático como una carga. “La idea de que las empresas se enfrentan algo contrapuesto, como es el clima y sus beneficios es un mito”, aseguró. Según explicó todas las inversiones que sus empresas han hecho para mejorar el consumo de la energía o las emisiones de gases de efecto invernadero han supuesto un beneficio.
El día anterior Philipp Hildebrand, vicepresidente de BlackRock, el mayor administrador de activos del mundo, dijo que las nuevas generaciones están aumentando la presión sobre los administradores de activos para que inviertan dinero en inversiones con una agenda ambiental fuerte y para empujar a las compañías a desempeñar un papel más importante en el desafío ante el cambio climático.
«La gente está empezando a darse cuenta de que este problema es demasiado grande para los gobiernos. las empresas deben formar parte de esta solución», dijo. «Estamos a punto de ver la mayor transferencia de riqueza en la historia de la humanidad” gracias a esa nueva generación de clientes, preocupados por los problemas medioambientales.
También las compañías de seguros parecen preocupadas por el cambio climático, Thomas Buberl, director general de la multinacional de seguros AXA, cree que si las temperaturas globales siguen aumentando aumentarán los desastres, como las sequías, los huracanes y los incendios forestales, frente a los cuales las compañías de seguros no podrían hacer frente. Por esa razón su compañía prefiere invertir cada vez menos en combustibles fósiles.
El ex vicepresidente de Estados Unidos, Al Gore, aseguró durante su intervención que la tecnología por sí sola no podrá salvar el mundo. “Hay que cambiar las políticas y las leyes”, aseguró, recordando que la industria de los combustibles fósiles reciben 5,3 billones de dólares anuales en subsidios, lo que ha hecho que en algunos Estados de EEUU los lobbistas de esta industria tengan mucho poder e influencia sobre los legisladores para lograr, por ejemplo, obstaculizar el desarrollo de la energía solar y eólica.
«Tenemos que convencer a todos los países del mundo» para que aumenten sus compromisos para reducir las emisiones y «salvar el futuro de la humanidad», dijo.
