A medida que el coronavirus avanza por todo el mundo, las organizaciones humanitarias alertan sobre la disminución de la ayuda
Sonia Elks para Thomson Reuters Foundation
Las ONG y las organizaciones de asistencia humanitaria han alertado sobre la disminución de suministros que salvan vidas y de la dificultad para acceder a los grupos de población más vulnerables a medida que se extiende el coronavirus. La principal razón es el cierre de fronteras y el bloqueo impuesto por muchos países.
Así lo cuentan
Rosa Sala, directora internacional de operaciones de Oxfam:
«Hemos tenido algunos retrasos y aumentos de coste de los equipos esenciales para salvar vidas a medida que las exportaciones se reducen, especialmente desde Asia. Dado que nuestros programas están dirigidos, administrados y atendidos principalmente por personal local, y debido a que tenemos reservas y adquirimos nuestros bienes y servicios localmente donde sea posible, esperamos minimizar las interrupciones. Sin embargo, prevemos que nuestras actividades se vean cada vez más afectadas.
Simona French, portavoz de Islamic Relief Wordlwide:
«Nos preocupa que nuestro personal pueda ofrecer programas de manera segura y tenga que limitar nuestro trabajo que salva vidas si las cosas se ponen realmente mal. Sin embargo Islamic Relief funciona en algunos de los escenarios más complicados del mundo, como Yemen y Siria, y estamos habituados a adaptar nuestras operaciones para proteger a los más necesitados. Lo que más nos preocupa es la capacidad de los sistemas de salud frágiles que no podrán hacer frente a una gran afluencia de pacientes y no contarán con procedimientos de contención adecuados. Esto hará que enfermen tanto los trabajadores humanitarios como la población».
Christopher Tidey, portavoz de UNICEF:
«Las restricciones de viaje podrían plantear un desafío y ya lo estamos viendo: problemas logísticos o de movimiento de personal. Si esto continúa, y dependiendo de cómo se vean afectadas las cadenas de suministro y la fabricación, podría haber implicaciones para los medicamentos y productos básicos esenciales para los niños. Es una preocupación y algo que estaremos siguiendo muy de cerca».
Erica van Deren, directora de Proyectos de World Vision:
«Algunos de los lugares donde trabajamos tienen algún tipo de restricciones gubernamentales al movimiento de personas. Otros países tomarán medidas similares en los próximos días. A medida que la propagación continúa, no podrán continuar las operaciones diarias normales que realiza World Vision trabajando en estrecha colaboración con las comunidades, reuniendo a niños y familias para apoyarlas».
Jane Howard, portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PAM):
«De momento el PMA no ha experimentado ningún impacto directo en su cadena de suministro. Sin embargo, la situación está evolucionando muy rápidamente y deberemos estar preparados para un empeoramiento de la situación. El mayor desafío sería una interrupción importante de las cadenas de suministro por el cierre de fronteras. La OMS defiende que no haya restricciones para viajes y mercancías, sin embargo, los países actuarán en función de sus propias evaluaciones de riesgos y algunas cadenas de suministro pueden verse afectadas».
Juliet Parker, directora de Operaciones de Acción Contra el Hambre UK:
«Indudablemente, el brote tendrá un impacto en el trabajo que realizamos, pero es demasiado pronto para decir cuál podría ser su magnitud. El impacto que ya estamos sufriendo es nuestra capacidad para mover personal. No solo podría ser un problema en relación con la respuesta a COVID-19, sino que cuestiona la eficacia con la que el sector podría responder a otras emergencias. Si en los próximos meses se produce un desastre natural es posible que las restricciones fronterizas puedan impedir la ayuda internacional».