Bulgaria: los refugiados que protestaron podrían ser expulsados
Las protestas se inciaron por las malas condiciones del centro de recepción de Harmanli, donde se hacinan más de 3.000 personas, un tercio niños
Las autoridades búlgaras han pedido la expulsión de los solicitantes de asilo por motivos de “seguridad nacional”. Fueron detenidos más de 300
Harmanli, el mayor centro de recepción de solicitantes de asilo de Bulgaria, situado a 250 kilómetros al sureste de la capital, Sofía, fue escenario la semana pasada de protestas de los solicitantes de asilo después de que las autoridades tomaran medidas para limitar el acceso de entrada y salida del ya saturado centro, alegando problemas sanitarios. Los solicitantes de asilo protestaron por esta decisión y por las malas condiciones del centro y derivó en lanzamiento de piedras y quema de neumáticos. La policía utilizó balas de goma y un cañón de agua para contener a la multitud.
Tras los incidentes, más de 300 solicitantes de asilo fueron arrestados, pero no se ha tomado ninguna medida para mejorar las deficientes condiciones del centro: hacinamiento -más de 3.100 personas, de las cuales un tercio son niños-, malas condiciones sanitarias, suministro deficiente de agua caliente, falta de medicamentos e inexistencia de instalaciones recreativas para niños o adultos-.
Las condiciones de acogida también son deficientes en otros centros de recepción e instalaciones de detención de Bulgaria. El centro de detención temporal de Elhovo, situado cerca de la frontera con Turquía, tiene una ocupación de casi el 130%, y las condiciones son deplorables.
Las condiciones de acogida y alojamiento de los solicitantes de asilo son tan malas en Bulgaria que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, ha pedido al gobierno búlgaro que tome medidas. Asimismo, ACNUR ha señalado que aunque no se opone al retorno -expulsión- de los solicitantes de asilo a quienes no se haya concedido protección internacional, dichos retornos
únicamente deberían tener lugar si se respetasen plenamente todas las garantías procesales, incluido el acceso a un procedimiento de asilo justo y eficaz y el derecho a un recurso judicial efectivo.