La epidemia, descontrolada por el colapso del sistema de salud, se ha disparado: más de 35.200 casos sospechosos en el último mes
El número de casos de cólera en Yemen ha aumentado, según ha informado la Organización Mundial de la Salud, hasta alcanzar los 35.217 casos sospechosos desde el pasado 27 de abril, cuando el brote comenzó a propagarse rápidamente.
Eso supone un aumento del 50 por ciento en la incidencia reportada en comparación con las cifras dadas el viernes pasado por el representante de la OMS en el país, Nevio Zagaria: 23.425 casos desde el 27 de abril.
El Boletín Epidemiológico de la OMS que cubre hasta el 22 de mayo registra 361 muertes, principalmente en las gobernaciones occidentales de Yemen, lo que supone un aumento de más de 100 fallecimientos desde los datos de pasado viernes (242).
La epidemia comenzó en octubre y creció hasta diciembre, para disminuir de nuevo, aunque en ningún momento llegó a ser controlada. Así, en abril, comenzaron a aumentar los casos, en medio de una situación de colapso de la economía y del sistema de salud, con pocas medicinas y personal sanitario trabajando.
El número total de casos reportados desde diciembre asciende a 61.000, según recoge el boletín. La previsión es que se podrían alcanzar los 300.000 casos en los próximos seis meses.
El cólera está causado por la infección por la bacteria Vibrio cholerae presente en el agua o los alimentos contaminados con heces. El cólera generalmente se manifiesta con un inicio repentino de diarrea acuosa aguda y puede matar en cuestión de horas, aunque tres cuartas partes de las personas infectadas no presentan síntomas.
El corto período de incubación significa que los brotes pueden propagarse con velocidad explosiva, especialmente en lugares sin agua potable y saneamiento adecuado, según la OMS.
Yemen, tras dos años de guerra civil, es un país arrasado, con casi 19 millones de personas que necesitan ayuda alimentaria, muchas al borde de la hambruna. Menos del 45 por ciento de las instalaciones de salud del país son totalmente funcionales.